El Abogado


Capitulo 6

EL ABOGADO

Después de la crisis existencial de Teresa, yo me disponía a acompañar a mi abuela a tribunales tal como se lo había prometido, cuando llegamos lo primero que me fije fue en un apuesto hombrecito que resulto ser el abogado de la contraparte. Nos sentamos y esperamos los alegatos de las partes y cuando pactaban un acuerdo no podía parar de mirar al abogado, cuando el se percato de mi provocativa mirada no tuve mas opción que sonreír, pero como estábamos en presencia de un juez no quise ser tan evidente por lo que mire a todos lados. Cuando hubo un minuto de descanso entre todas las firmas me fui un momento afuera a fumar un cigarro cuando alguien me pregunto si tenia fuego, le respondí que sí sin saber de quien se trataba cuando me voltee a verlo era el apuesto abogado, sentí el calor en mi rostro de vergüenza después de haberlo mirado todo el tiempo y me dijo: a veces es bueno fumarse un cigarro, yo se dije ” mmmm” en señal de aceptación pero nuestra conversación duro pocos segundos porque nos llamaron para volver a la oficina. Pensaba que tal ves no lo volvería a ver, pero el destino quiso otra cosa, como acuerdo tendría que verlo por lo menos 6 meses mas y nada mas que a su oficina.
Todos los meses tenia que ir a verlo para saldar la deuda y como se repacto lo tendría que ver algún tiempo. La primera vez que fui me recibió muy amablemente y nada mas, la segunda me pidió mi número de teléfono y la tercera que saliéramos juntos. Todo se fue muy rápido pero a mi me encantaba, primero me dijo que me invitaba a tomar un café por ahí, yo pensé, un café se toma en la mañana o después del trabajo así que le di a elegir ambos horarios, quedamos de salir un viernes por lo que me llamo a eso de las 18.00 horas para que nos juntáramos, cuando le dije que podía ser en la mañana se echo a reír diciendo que a esa hora el trabajaba o sea que me dijo que quería tomar un café pero en verdad quería cenar o algo por el estilo, le dije que a las 18 horas estaba bien y nos juntamos. El llego a la hora y para variar yo llegue tarde, trate de darle las escusas mas creíbles pero al parecer no fui muy convincente, me invito a subir a su auto y me dijo que tenia planes para cenar pero como yo había llegado 2 horas tarde me llevaría a otro lugar así que fuimos bello club con vista al mar donde nos servimos un aperitivo y nos dedicamos a charlar.
Me dijo que era abogado desde hace 15 años o mas, que tenia 40 años, que tenia un departamento y que era soltero, me costo que me revelara su edad por lo que le pille su problema con los años, luego le pregunte ¿Por qué sigues soltero? Y me dijo que no había conocido a la mujer indicada, hubo un silencio y me dijo ¿nos vamos? Y eso hicimos, caminamos hacia un mirador abrazados como si el mundo se fuera a terminar, el era mucho mas alto que yo por lo que me sentía muy cómoda en sus brazos, nos detuvimos y me tomo las manos, luego nos abrazamos porque yo estaba muerta de frió, sentí una protuberancia que no era otra cosa que su estomago abultado, eso mata las pasiones pero seguí, luego me dijo que no lo dañara, porque se enamoraba muy fácilmente y yo le dije que la dañada podía ser yo porque me pasaba lo mismo. Nos reímos un rato y volvimos al auto, pero la cita no terminaba ahí, tenia otra sorpresa preparada, mientras conducía hablamos de muchas cosas y entre una de ellas le mencione que mi pasión secreta era ser abogada, que pretendía ir a la universidad algún día, lo peor fue su respuesta pues me dijo que

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